¿Qué son las clases prenatales?

Las clases prenatales ayudan a la mujer a prepararse física y emocionalmente para el nacimiento de su bebé. Son parte fundamental de los cuidados en el embarazo. En las clases se pueden realizar preguntas y obtener información sobre las diferentes formas en las que puede nacer el bebé.

En los casos de mujeres que trabajan, estas tienen derecho a ausentarse de sus labores para asistir a las clases dado que el cuidado prenatal (incluidas las clases) es la clave para madres y bebés saludables, por tanto es importante no faltar a ninguna de las citas planificadas.

 

¿Cuándo deben comenzar los cuidados en el embarazo?

Después de confirmar el embarazo el médico iniciará de inmediato el control prenatal. La mayoría de las mujeres tienen su primera (y más larga) consulta prenatal entre la 8ª y 12º semana de gestación. En este sentido, cuanto antes se inicien los cuidados en el embarazo, mejor. Estas consultas son una vez al mes hasta las 28 semanas, a partir de allí son dos veces al mes hasta la semana 36 y después semanalmente durante la última etapa del embarazo.

La primera consulta médica en el embarazo

La primera consulta será la más larga ya que hay muchas cosas que se deben preguntar. Las respuestas a todas estas preguntas ayudarán al médico o matrona a identificar cualquier riesgo para el embarazo o el bebé.

Es posible que la entrevista incluya cierta preguntas respecto a:

  • La fecha de la última menstruación a fin de estimar la fecha probable de parto.
  • Historia médica y antecedentes médicos familiares de la madre y el padre del bebé en camino. Esto incluye origen étnico a fin de descartar cualquier riesgo de problemas genéticos o hereditarios en el bebé
  • Si existen antecedentes de embarazos múltiples en la familia tanto de la madre como del padre
  • Información sobre embarazos previos, incluidos abortos y mortinatos (si los hubiere)
  • Alergias conocidas de la madre
  • Enfermedades y uso de algún medicamento por parte de la madre
  • Condiciones de salud delicadas y cirugías que hubiere tenido la futura mamá en el pasado
  • Además es posible que se indague un poco sobre el entorno tale como el trabajo y las condiciones de vida dado que algunas circunstancias podrían comprometer o afectar el embarazo

Examen médico general

Para los cuidados en el embarazo con los que comienza la consulta médica, se realiza un examen físico general para evaluar el estado del corazón y pulmones además del estado integral de salud, además se mide la tensión arterial, algo que se repetirá en cada una de las consultas.

Examen interno

En ocasiones el médico puede llevar a cabo un examen interno para determinar el tamaño del útero y por tanto establecer el tiempo de gestación. Durante este procedimiento, la paciente debe acostarse boca arriba con las piernas sobre unos soportes especiales y las rodillas separadas de manera que el médico puede usar uno o dos dedos para examinar el área de la vagina mientras presiona con suavidad el abdomen con su otra mano.

Este examen no es doloroso aunque si un poco incómodo, aunque al relajarte todo pasará sin mayores problemas. En la actualidad muchos médicos prefieren el ultrasonido en lugar del examen clínico ya que es menos invasivo y aporta más información.

Evaluación de la talla

La altura de la persona es un indicador bastante aproximado del tamaño de la pelvis siendo esto muy importante dado que en los casos de pelvis pequeña pueden presentarse dificultades durante el parto. Sin embargo, cualquier mujer que mida más de 1 metro con 50 cm no debería tener ningún problema.

Evaluación del peso

El peso se determina en la primera consulta y se lleva un control de su incremento mes a mes en cada control para evaluar cuanto está aumentado.

Exámenes de sangre

Los exámenes de sangre suelen realizarse en la primera consulta a fin de determinar:

  • Grupo sanguíneo de la madre
  • Descartar anemia
  • Identificar cualquier enfermedad que pueda dañar al bebé como el caso de rubéola, sífilis o hepatitis B

Examen de Orina

En la primera consulta también se toma una muestra de orina para determinar:

  • Niveles de azúcar – ya que esto puede ser un signo de diabetes gestacional
  • Proteínas – ya que pueden ser un indicador de la presencia de infecciones que deben ser tratadas

Visitas de control

Algunos centros pesan a las pacientes en todos los controles mientras que otros no. Por lo tanto, esto debe tenerse en cuenta a fin de usar más o menos el mismo tipo de atuendo en cada consulta. La mayor parte del peso se gana después de las 20 semanas y en total no deberían aumentarse más de 10 a 12 Kg durante todo el embarazo.

En cada una de las consultas control se palpará el abdomen para evaluar tanto la posición como la velocidad de crecimiento del bebé.

Otro elemento que será monitorizado exhaustivamente durante el embarazo es la presión sanguínea. Hacia el final del embarazo, casi todas las mujeres tienen las piernas hinchadas, en especial al final del día y más aún cuando se ha estado de pie toda la jornada.

Hay ciertos signos de los cuales se debe estar atento cuando comienzan los cuidados en el embarazo. En los casos donde se identifique inflamación de las manos y los pies, se debe consultar de inmediato con la matrona o el médico ya que este puede ser un signo de pre-eclampsia, la cual suele aparecer hacia el final del embarazo y se caracteriza por un aumento de los niveles de tensión arterial e inflamación de las manos, pies y el rostro.

La pre-eclampsia leve no es peligrosa pero debe ser tratada ya que puede evolucionar a una condición más seria conocida como eclampsia, la cual cursa con convulsiones durante el embarazo o inmediatamente después del parto. En caso de preocupación sobre alguna de estas situaciones se debe consultar con el médico para evaluar la situación detalladamente.

Si la mujer es mayor de 37 años es posible que sea necesario realizar pruebas especiales, de manera que si se cumple con esta condición se debe hablar con el médico al respecto.

Detalles de las consultas

Después de la semana 14 de gestación, podrás escuchar el corazón de tu bebé durante el ultrasonido ya que este amplifica el ruido que producen los latidos de su corazón.

Los ultrasonidos se realizan regularmente, por lo general uno por cada trimestre (aunque podrían ser más) siendo un procedimiento totalmente seguro e indoloro.

El ultrasonido funciona enviando ondas sonoras a través de la piel del abdomen las cuales producen ecos que ayudan a construir una imagen tanto del bebé como del útero. Durante el estudio de ultrasonido tanto la madre como el padre podrán ver a su bebé en un pequeña pantalla e incluso en ciertas ocasiones le pueden dar una copia impresa de recuerdo.

Cerca de la semana 16, es posible que realicen una prueba de sangre para determinar los niveles de Alfa Feto Proteína (AFP) la cual cuando presenta niveles elevados puede estar indicando que el bebé tiene problemas del tubo neural tales como espina bífida. Si los niveles de AFP son elevados será necesario realizar estudios complementarios tales como la amniocentesis la cual es útil para descartar espina bífida y síndrome de Down. La amniocentesis implica un pequeño riesgo (1 en 100) de aborto por lo que no se realiza de rutina a menos que exista una indicación clara como los niveles de AFP elevados o edad de la madre superior a los 37 años.

Muchas mujeres suelen sentirse aburridas y frustradas por la gran cantidad de pruebas y los tiempos de espera en la clínica. Es por ello que lo ideal es acudir a los controles prenatales acompañada por la pareja o un familiar cercano para que le haga compañía, ya que es muy importante acudir a todos los controles prenatales para asegurarse de que tanto la madre como el bebé reciban todos los cuidados en el embarazo para mantenerse sanos y llevar a término un embarazo feliz.

Pruebas caseras para los cuidados en el embarazo

Nosotros ofrecemos una prueba conocida como Amniosense, la cual detecta la pérdida anormal de líquido amniótico durante el embarazo. La humedad repentina e injustificada es común durante el embarazo siendo necesario determinar si se trata o no de líquido amniótico.

Amniosense es muy similar a un protector diario que permite seguir con las rutinas diarias mientras la prueba se encarga de determinar si el flujo es o no líquido amniótico.