¿Qué es la amniocentesis?
La amniocentesis es una prueba prenatal que permite a los médicos tener información detallada sobre la salud y el desarrollo de tu bebé.
¿Cómo se realiza la amniocentesis?
La amniocentesis se realiza insertando una aguja hueca muy fina a través de la pared del abdomen hasta el útero para tomar luego un muestra del líquido amniótico que rodea al bebé. Se usa un equipo de ultrasonido durante todo el procedimiento para garantizar que no suceda ninguna eventualidad.
¿Qué es el líquido amniótico?
El líquido amniótico es un fluido incoloro que rodea al bebé dentro del útero y ayuda a protegerlo dentro del saco amniótico; además este líquido juega un papel fundamental en el desarrollo de los órganos internos tales como los pulmones y riñones. Cuando el saco amniótico se rompe antes de entrar en parto, el líquido que sale es el fluído amniótico; esta ruptura de las membranas es lo que se conoce como “romper aguas”.
¿Qué es la ruptura de las membranas?
Antes del parto la mujer “rompe aguas” debido a que el saco responsable de contener el líquido amniótico se ha hecho muy delgado y frágil para contener la presión del líquido que puede salir todo a la vez o, con más frecuencia, comenzar a gotear gradualmente. En ocasiones es difícil incluso para los médicos determinar si se trata de líquido amniótico u orina.
¿Por qué se realiza la amniocentesis?
La amniocentesis suele realizarse para determinar si el bebé tiene algún tipo de problema genético o cromosómico tal como el Síndrome de Down. Además se puede realizar esta prueba para saber si los pulmones del bebé están lo suficientemente maduros en caso que se presentase un parto prematuro el cual se define como el parto antes de las 37 semanas de gestación.
¿Cuándo se realiza la amniocentesis?
La amniocentesis normalmente se realiza entre las semanas 16 y 18 de gestación.
¿Debo practicarme una amniocentesis?
No, ya que esta prueba no forma parte de los exámenes de rutina dado que implica un pequeño riesgo de aborto espontáneo (1 de cada 150 mujeres) en virtud de lo cual se recomienda sólo cuando existe un riesgo elevado de defectos congénitos. Algunas de las razones por las que se indica una amniocentesis son:
- Si tienes más de 35 años dado que el riesgo de problemas cromosómicos aumenta con la edad.
- En los casos de mujeres que ya han tenido un bebé con problemas congénitos.
- Si en la prueba de alfafetoproteína los valores son anormales. La alfafetoproteína es una sustancia que circula en la sangre y cuando sus niveles están elevados es probable que el bebé tenga problema del tubo neural tales como la espina bífida.
- En los casos de historia familiar que haga sospechar que el bebé tenga riesgo de defectos congénitos.
¿Qué ocurre después de la amniocentesis?
Después de la prueba tendrás que descansar un poco antes de ir a casa. Entre 1 y 2% de las mujeres tendrán cólicos, manchado vaginal o pequeñas fugas de líquido amniótico. En caso que cualquiera de los síntomas previamente mencionados se presente debes llamar al médico de inmediato.
¿Cuándo me entregan los resultados?
En promedio los resultados tardan unas tres semanas en ser entregados.