Descripción
Si has vivido en diferentes lugares, habrás notado que la calidad del agua del grifo varía. En algunas zonas el agua tiene un sabor limpio y fresco, mientras que en otras sabe a óxido o áspera. Aunque la Agencia de Protección Ambiental ha establecido normativas para la calidad del agua del grifo, si tienes alguna sospecha, puedes realizar estos tests al agua que consumes habitualmente para asegurarte que el agua está en perfectas condiciones y no se rebasa algún parámetro determinado o incluso esté contaminada. Estas pruebas miden el contenido de cloro, la dureza, la alcalinidad y el pH del agua.
Asimismo, estas tiras son un accesorio imprescindible para los amantes de los deportes al aire libre, acampada, supervivencia, etc, ya que indicarán con precisión si el agua del río o arroyo que nos encontremos es potable y apta para consumo humano.
No deben faltar nunca en la maleta cuando viajamos, sobre todo a la hora de visitar países con mala calidad de agua. Estos tests nos permitirán averiguar si podemos consumir el agua del grifo sin problema o debemos optar mejor por el agua embotellada.
Estos tests de calidad del agua son sencillos y fáciles de utilizar, si se siguen rigurosamente las instrucciones y se compara los resultados con la carta de color incluida, estos tests tienen una precisión del 99%.
¿Cómo se utilizan?
1) Recoja una muestra de agua en un recipiente limpio y seco
2) Coja un test de la bolsa y abra el sobre sellado de aluminio cuando lo tenga todo preparado para comenzar la prueba.
3) Sumerja la tira (máximo 1 segundo) en el agua.
4) Toque los bordes de un lado de la tira reactiva con un papel absorbente limpio para eliminar el exceso.
5) Lea las almohadillas de colores con los reactivos una vez pasados 30-60 segundos.
Nuestros tests tienen una caducidad que oscila normalmente entre 1 a 2 años. Una vez abierto el sobre sellado que contiene la tira, el test debe ser utilizado inmediatamente.